Equipo de gimnasia rítmica tiene esperanza, resiliencia y valor
En octubre del año pasado, con Tel Aviv bajo fuego, la selección mexicana de gimnasia rítmica sorteaba los horrores de la guerra con los acordes de La Llorona, que sonaba en las bocinas del centro de entrenamiento a pocos metros de un búnker que, de ser necesario, salvaría su vida.
“En 2023 tocamos fondo, primero por la zozobra y angustia que pasamos al estar en una zona hostil y después por una serie de lesiones que tardaron mucho en sanar. No ha sido un camino sencillo y por eso valoramos lo que hemos conseguido a partir de entonces”, compartió Blajaith Aguilar, entrenadora del equipo que obtuvo una histórica clasificación a los Juegos Olímpicos de París 2024.
Meses después de la pesadilla, a 20 mil kilómetros de distancia, México logró su boleto a la justa veraniega en Lima, Perú.
Adirem Tejeda, Dalia Alcocer, Kimberly Salazar, Sofía Flores y Julia Gutiérrez son el equipo de la esperanza, la resiliencia y el valor. Tejeda, Alcocer y Gutiérrez son yucatecas.
“Pasamos por mucho, la ruta ha sido larga y con muchas piedras en el camino, lo que nos sucedió entrenando con las campeonas mundiales en Israel nos fortaleció y convirtió en un equipo más unido, una cualidad muy importante en un deporte de apreciación como el nuestro. Sufrimos, pero todas podremos cumplir nuestro sueño”, opinó Tejeda, capitana tricolor. Adirem es la última “sobreviviente” del primer equipo que entrenó Aguilar. Aunque todas sus compañeras se retiraron tras no clasificar a Tokio, ella permaneció con la selección y no claudicó hasta poder ser seleccionada olímpica.
“No quería quedarme con la espinita de vivir el máximo sueño al que puede aspirar una atleta. Dejé de lado muchos planes y me concentré en apoyar a mis nuevas compañeras, a potencializar sus habilidades”, explicó.
“A París vamos a dejar huella, a demostrar que México ya no es un nadie en la gimnasia rítmica, sino un rival a vencer”, dijo Kimberly.
Blajaith y Adriana Loftus, de natación artística, serán las únicas dos entrenadoras mexicanas en la capital francesa.
De la mano de la tapatía, el equipo ha conseguido medallas históricas en competencias como los Juegos Centroamericanos, Panamericanos, mundiales y copas del mundo.
“Este conjunto está para cosas grandes. Quedamos sextas en el mundial. Imagínense qué se puede lograr con más apoyo”, manifestó Blajaith.
En París, la selección presentará rutinas muy particulares. En aro, participarán con una mezcla de música setentera que muestre la alegría del mexicano, mientras que en la ejecución mixta honrarán a la sede iniciando la rutina con una posición que evoca al Museo de Louvre.
Hace unos días el equipo brilló en el Panamericano de Guatemala con una cosecha de un oro, una plata y un bronce. Para cerrar su preparación, el lunes viajará a Milán, donde participará en una copa del mundo, después irá a un campamento a Egipto para volver a México los primeros días de julio y viajar a París un mes después.